sábado, 15 de octubre de 2011

SOÑAR... DESPIERTOS: VIVAMOS ESA SENSACIÓN


Hay un momento mágico e inigualable, y es aquel en el que -dentro de un sueño - descubrimos que estamos soñando. Miramos a nuestro alrededor, y encontramos un mundo que parece tan real como la realidad, pero que sabemos que sólo sucede en nuestra mente. Entonces nos damos cuenta de que las reglas allí las ponemos nosotros mismos, los peligros no son tales, no existen limitaciones. Somos realmente poderosos, podemos tomar decisiones concientemente, y manipular nuestro sueño para llegar adonde sea. La emoción nos desborda, las posibilidades son infinitas: hemos entrado en un sueño lúcido. 

 
Generalmente pasamos por la vida sin cuestionarnos acerca de la naturaleza de la realidad que experimentamos, y reaccionamos mecánicamente según nuestros condicionamientos previos a los desafíos que se nos presentan. Durante la noche cuando dormimos y soñamos, continuamos con esta rutina y reaccionamos ante los hechos y objetos oníricos como si fueran absolutamente "reales", perdiéndonos la oportunidad de disfrutar y explorar todo el potencial del mundo de los sueños con completa libertad. 

 
Mediante la concentración y la atención, es posible cambiar estos patrones, para vivir nuestros sueños completamente "despiertos", dándonos cuenta de que estamos soñando mientras lo hacemos. La sensación de este "despertar" es imposible de describir, hay que vivirlo. Las posibilidades que se abren son enormes, y el potencial para crecer y enriquecer nuestras vidas es de un enorme valor, como veremos más adelante.  Esto no es una fantasía esotérica ni tampoco una forma de visualización o imaginería que se confunde con un sueño, es una realidad demostrada por la ciencia, un fenómeno, que si bien es considerado como algo paradójico ya aún extraño para los científicos, ha sido demostrado en laboratorios del sueño.