martes, 27 de septiembre de 2011

EL MUNDO ESTÁ DENTRO DE TÍ



La experiencia habitual nos da la sensación de que existimos en el Universo, de que tu existes en algún lugar en el mundo. Eso es una mentira. La verdad es que todo el mundo existe en nosotros. El cuerpo y la mente existen en nosotros. El cuerpo, la mente y el mundo me ocurren. Tengo la mente, y de la mente proyecto el cuerpo, y del cuerpo proyecto el mundo. Es mi conciencia quien construye el mundo. Tú no estás ahí­ sino que estás en mi conciencia y yo estoy en tu conciencia. El lugar en el que yo estoy en tu conciencia, y el lugar en el que tu estás en mi conciencia, es el mismo lugar. No existes tu como un cuerpo fí­sico allá­ fuera. Mi cerebro me permite verlo, pero mi cerebro no tiene una experiencia directa del mundo. Lo único que hace mi cerebro es responder a la electricidad, a lo quí­mico, a las hormonas, y todo eso te crea a ti allá fuera. Pero tanto yo, que te creo a ti, como tu, que me creas a mi­, somos una conciencia que está experimentando con las formas y fenómenos.
Cuando veas algo piensa: eso está en mi. Esos árboles que están allá­ fuera son mis pulmones. Si ellos no respirasen yo no respirara y si yo no respirase, ellos no respirarían. La Tierra es nuestro cuerpo fí­sico, la atmófera es nuestra respiración, las aguas son nuestra circulación. No es cierto eso de que yo estoy aquí y el mundo está allá afuera. Tenemos un cuerpo personal y un cuerpo universal, y los dos son nuestros, tanto uno como el otro. Cuando nos damos cuenta de que el mundo está en nosotros, tenemos con él una relación í­ntima. Además podemos tener un conocimiento í­ntimo del mundo, y a partir de este conocimiento alcanzamos la paz con el mundo. A partir de la paz,  reconocemos que el mundo, el Universo, es un ser consciente. Es nuestro cuerpo extendido. Cuando somos tan í­ntimos con nuestro cuerpo extendido como lo somos con nuestro cuerpo personal, nos habla, nos podemos comunicar. Cuando entramos en comunión como un ser conciente nos sorprende con dones en forma de sincroní­as y de coincidencias con significado.
DEEPAK CHOPRA